Reseña por Asun As para El Mundo de Tulsa
Daryl Hockin es un escocés afincado en Madrid que vino a España hace tres años para cumplir sus sueños. Músico inquieto desde adolescente le ha llamado a su LP debut “Stop Dreaming”, nombre que seguramente no haya quedado a merced del azar y que a buen seguro si se lo haya otorgado su recorrido musical o lo que es lo mismo sus ganas de comerse el mundo.
De influencias diversas, se atreve con la música escocesa tradicional, el blues, el reggae y el pop, aunque su andadura musical comenzó haciendo pinitos con el punk. “Stop Dreaming” es un trabajo de nueve canciones que van desde los cuatro minutos hasta los bien pasados cinco minutos y medio, demostrando así Hockin que en el arrojo va todo su potencial, valentía y riesgo, un primer contacto con paso de gigante que le ha servido para dejar a un lado lo del Ep debut con marca de principiante.
Abre el disco I don´t Trush Her Anymore, un tema con ritmo reggae que me recuerda a algún tema de Marley, aunque no estoy segura pues a la que suscribe todo el reggae le suena igual. Con Heartbeat el disco da un giro de tuerca y se abre a un mundo de guitarras y guitarrazos intensos para volver a bajar en la montaña rusa musical con Swans Can Fly, una melodía preciosa que evoca sentimientos puros que te confirman que el disco merece la pena ser escuchado y analizado.
I Dont Though es la cuarta y la mas extensa canción del disco. Un tema blues –reggae fusion que bien podría ser del mismísimo Eric Clapton, y nunca mejor dicho pues el soul se da un aire a Clapton en la versión del tema de Marley I shot the Sheriff. La elegancia de This Must be the Place (Naive Melody) y la luminosidad de Stop Dreaming, canción que pone nombre al disco, también están presentes en este primer trabajo de Hockin y que recomiendo a todo el mundo que escuche, pues el disco posee las notas exactas que hilvanan las melodías.
Stop Dreaming no es un disco de etiquetas, ni siquiera es un disco al que le puedas encasillar en un género, pues su eclecticismo es tan evidente que se te escurre por entre las manos la definición de lo que es o de lo que pudiera parecer que es.
Y si alguien está interesado en conocer a Hockin el suele dejarse ver con sus instrumentos por Lavapies, también da clases de guitarra, apero que le acompaña desde que era adolescente, fue su primer artilugio, y desde El Mundo de Tulsa deseamos a este gran músico que no pare en intentar cumplir sus sueños, que nada les pare y que su ambición nunca dejen de ir a la par de su talento.
Contratación Daryl Hockin
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