Crónica por Manu López para EMDT
Un año más el Dcode Festival llegó a su cita anual en la recta final de la temporada de festivales. Como viene ocurriendo en las últimas ediciones la organización decidió aglutinar todo su cartel en una sola jornada, al estilo europeo, y dividido en tres escenarios.
El grupo encargado de abrir la mañana de este soleado Sábado 7 de Septiembre fue Carolina Durante. Se hicieron notar desde la primera de sus canciones y funcionaron como llamamiento eficaz para que el festival abriera de la mejor manera. Son uno de los grupos revelación en el último año, y así lo demostraron, a pesar de los problemas de sonido que tuvieron durante el show. Directo potente y cada vez con menos figuras dentro de un estilo que viene arrasando con cada nueva canción. De esta forma dimos el pistoletazo de salida a una jornada que prometía.
El siguiente grupo en tocar en este escenario Élite fue Picture this. Esta banda irlandesa de pop, que en un primer momento pudiera parecer desconocida para el público español, fue atrapando poco a poco a los asistentes. Melodías pegadizas y seguridad sobre el escenario. Una sensacional mezcla entre baladas y electricidad bien entendida. Conforme su concierto fue avanzando el público fue enganchándose. Cierto es que muchos ya se preparaban para el lo próximo: La casa azul. Estos, presentando ‘La gran esfera’, y sin estar para nada acostumbrados a este horario matutino, consiguieron encender la escena. Son otro de los grupos que vienen tocando sin parar a lo largo y ancho del país. El desenfado y el baile como bandera infalible.
Una vez atravesada la línea de la mañana llegó uno de los platos fuertes nacionales. Sin ir más lejos venían de estrenar single el día anterior: Algunos tenemos fe. Por supuesto hablamos de Viva Suecia. Este grupo viene arrasando y parece no tener techo. Han recogido el relevo de las mejores bandas indies de nuestro país y su directo ha mejorado notablemente de un tiempo a esta parte. Fue el primer concierto de los escenarios principales, y ya se pudo ver la gran cantidad de público que había asistido al festival desde primera hora.
La tarde avanzó entre los conciertos de St Woods, una promesa que da pasos hacia delante con firmeza, acompañada por una excelente banda y una voz que nos recuerda a los mejores; Gerry Cinnamon, quien con su guitarra y voz nos cautivó a través de canciones ornamentadas con mimo y buen gusto; hasta llegar a Miss Caffeina, ya veteranos en esto de los festivales y quienes con su último trabajo, Oh Long Johnson, hicieron bailar a todo aquel que se encontraba cerca del escenario 1. Toda una fiesta.
A partir de las 20h comenzó en el escenario 2 el concierto de Eels. Mark Oliver Everett ofreció un show incontestable. Son ya muchos años entre canciones, mostrando un nervio que lo convierte en un artista único. Con toda seguridad fue uno de los tramos más especiales del festival. Inmediatamente después era el turno de The Cardigans, la banda sueca vino a interpretar su laureado y archiconocido Gran Turismo. Grandes canciones que llevan mucho tiempo entre nosotros y que afilaron la nostalgia de los allí presentes.
Caída la noche llegó el turno de Amaral, con Eva a la cabeza. Demostrando que tienen uno de los mejores directos de este país. Venían a presentar su recién estrenado trabajo, Salto al color, sin olvidar los grandes temas que ocupan su extensa carrera. Creo que todos estamos de acuerdo que este fue sin duda uno de los mejores conciertos del DCODE 2019. Una puesta en escena sobresaliente y una interpretación de las canciones a la altura. Larga vida a un grupo como Amaral, repletos de buen hacer y magníficas canciones.
Una vez encendida la mecha llegaba el turno de Two Door Cinema Club. No defraudaron. Como cabeza de cartel dieron un espectáculo a la altura del nombre del grupo. El festival era una fiesta y lo demostraron haciéndonos bailar a todos. Quedaba cerrar la noche, y de ello se encargo con maestría, electricidad y guitarras de vértigo Kaiser Chiefs. Bendita banda que toca como si se acabara el mundo ahí fuera. Fue todo un placer. Como todo este fantástico festival, ya asentado, que gana enteros en cada edición.