Entrevista JAvier Miñano en Mexico por Alonso Silva para El Mundo de Tulsa

Entrevista a Javier Miñano en Mexico por Alonso Silva para El Mundo de Tulsa

 

Transitar libremente por las calles de mi ciudad es, desde hace varios años, una especie de lujo que no muchos podemos darnos. Desafortunadamente, la vida cotidiana en la Ciudad de México se ha convertido en una verdadera odisea, debido a las múltiples problemáticas dignas de una sociedad en crisis (social, económica, política, cultural, etcétera).

Sin embargo, para beneplácito de unos cuantos, hay espacios en los que uno puede caminar libre de todo prejuicio, ya sea solo o acompañado (una pareja, un amigo, un perro, tus audífonos, etcétera).

Corre el año del 2016 en México, un país, como decía, en crisis, pero también con deseo y con muchas cosas buenas que enorgullecen a cada mexicano, ya sea de nacimiento o por sentimiento.

La Colonia Roma, una de las más transitadas y visitadas de la Ciudad de México, nos ha ido acostumbrando a los cafecitos, a las librerías, a los parques, a la música. Y es precisamente aquí en donde he pactado un encuentro con Javier Miñano, un músico español que, tras un año de estancia, confiesa que se ha enamorado de México, gracias al cobijo que ha recibido como persona y como músico.

Esta charla/entrevista con Miñano se da en un contexto de gran tensión en la sociedad mexicana, cerca de fechas patrias y son un crudo cuestionamiento a nuestras autoridades sobre hechos atroces que han ocurrido en este país desde hace varios años. Como mencioné en un texto anterior (la entrevista con Mäbu), no estoy aquí para dar un discurso político ni mucho menos. Esa no es la intención. Sin embargo, considero necesaria la mención para llevarles una historia más real y, sobre todo, honesta.

Conocí a Javier hace varios meses y, además de ser una gran persona y gran compañía, es un muy buen músico. Semanas atrás se presentó también en el Foro del Tejedor, ofreciendo un show intimista y cargado de nostalgia. Y es él mismo quien nos cuenta cómo le fue, cómo se encuentra y, sobre todo, cómo se ha sentido lejos de su tierra. Está en México y esto es lo que nos platica.  

Háblame de Javier; háblame de aquellos primeros años en los que coges por primera vez una guitarra y comienzas a escribir tus primeras canciones…

Vaya. Acabas de llevarme a un sitio al que hacía tiempo que no iba. La primera vez que descubrí una guitarra española, que tenía cuatro cuerdas y era de mi hermano mayor, dije “coño, ¿esto qué es?” y empecé a darle unos cuantos golpecillos con la mano derecha que terminaron por engancharme y podría decirse que ahí comenzó el veneno de la música y empecé a aprender a tocar la guitarra. Las canciones, después, vinieron solas; vaya, nunca pensé que podía hacer una canción, incluso, al día de hoy, me da la impresión de que ya no podría hacer más canciones, como que se me ha acabado todo lo que tengo por contar, no sé… Cuando recuerdo eso, o cuando le enseñé lo que había hecho a mi hermano, me acuerdo que él me decía “tío, pero eso es una canción” y a mí me costaba aceptarlo, como que no me la creía ni yo mismo que podía hacer una canción. Fue algo muy bonito y muy mágico.

Remontándonos a esos años en los que eras muy joven, ¿cuál fue formación lírica? Te lo pregunto porque noto en tus canciones mucha nostalgia, algo que sólo yo he visto en España.

Mis influencias, vaya, son muchas. Yo crecí escuchando a un grupo de rock en español que se llamaban los 091. Ese tipo de grupos los escuchaba, sobre todo, mi hermano, y a mí, de alguna forma, me llamó mucha la atención la lírica, la forma de expresarse, de decir las cosas, tan sutil y a la vez tan agresivo y tan metafórico. Tengo otros hermanos más mayores que escuchaban a Serrat, Sabina, a Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, y yo como que mamé un poco de todo ello. Es más, recuerdo que mi hermana mayor amaba a Juan Gabriel… En cierta forma, ese es como el beneficio de ser el pequeño, ¿no? Poder recopilar todo ese legado. Años después descubrí toda la movida de Nacha Pop, Gabinete Caligari, Héroes del Silencio, que me impresionaron mucho…

Llegó un punto, Javier, en el que decidiste dedicarte a la música. Cuéntame de esos años, de aquellas experiencias como músico en España, antes de que tomaras la decisión de dejar tu país y comenzar un nuevo rumbo, del cual hablaremos en un momento…

Todo ello fue muy bonito y muy inocente, en el sentido de que era la idea era sólo pasárnosla bien, ¿no? Tenía unos 16 o 17 años y lo que quería era tocar y ligar con las

chicas. Nos pasábamos días enteros en los locales de ensayo, comprando cervezas, y venían muchas amigas, amigos a escuchar el ensayo. Fue un experiencia que la recuerdo con mucho cariño, porque fue algo que me marcó como músico. De hecho, en ese entonces, yo tocaba el bajo, la guitarra vino después. Con mi banda, hacíamos una música muy ‘punkarra’, ¿no? Nos llamábamos Los Jet Sex; éramos así de osados, ¿no? Vaya, me la pasé muy bien y tuve mucha suerte porque mis compañeros de la banda eran, todos, mayores que yo y aprendí muchísimo de ellos. Eran músicos que tenían su trayectoria y habían recorrido un camino más largo que el mío y aprendí mucho de grupos y de experiencias y demás. Incluso, recuerdo que no me dejaban entrar al lugar al que íbamos a tocar por mi edad, porque era muy pequeño. Después, claro, lo arreglamos y lo hicimos, pero recuerdo mucho eso, ¿no?

Una vez que llegas a México, ¿qué sucede? En principio, ¿a qué venías a México?

Vine a México a conocerlo, a verlo, a sentirlo, a vivirlo, sin ningún otro propósito. Me habían hablado muchísimo de este país y en España decimos que México es la puerta, musicalmente hablando, de toda América y yo, personalmente, añado que es la puerta de Europa. Musicalmente hablando, México es brutal. Entonces, yo venía con mucho respeto a conocerlo y a escribir canciones. De repente, las cosas empezaron a ir bien. Hice un show y el público pidió más y, bueno, aquí estoy. Fue un flechazo que tuve a primera vista con México y los mexicanos. Y por ellos estoy aquí, la verdad.

¿Cuánto tiempo llevas viviendo en México?

Llevo un año viviendo acá. A finales del año, volveré a España y después regresaré a México. Quiero grabar mi segundo disco acá. La verdad es que estoy muy enganchado a México. Para mí fue algo que yo no me esperaba y estoy encantado.

México, como bien decías, ha sido la puerta para muchas bandas. Hablando particularmente de España, bandas como Héroes del Silencio, Duncan Dhu, Love of Lesbian, Vetusta Morla, por mencionar algunas, han encontrado un cobijo inigualable en este país. En ese sentido, ¿cómo ha arropado el público mexicano las canciones de Javier Miñano?

La reacción del público ha sido súper bonita. Ellos son los culpables de que yo esté aquí. Ha sido muy increíble. ¿Sabes una cosa? En México hay mucha pasión por la música. Lo que le gusta al mexicano, es para siempre. Conmigo ha sido algo muy bonito. A mis

shows cada vez viene más gente que conoce mis rolas porque tiene esa inquietud por conocer cosas nuevas y es algo que, desafortunadamente, en España no hay. Allá, la gente quiere conocer lo que sale en la radio, en los comerciales. Incluso, si te fijas, los festivales allá, y lo digo con pena, son todos iguales; son las mismas bandas pero en distinto orden. Eso quiere decir que no hay una inquietud por conocer a las bandas nuevas. No digo que esté mal pero es triste, porque hay muchísimo talento en los locales de ensayo pero no les dan la oportunidad. La industria sólo quiere ganar dinero. México, por el contrario, tiene esa inquietud, te da la oportunidad de escucharte. Le puedes gustar o no, pero si le gustas, se queda contigo hasta el final. Y eso, para los que hacemos canciones, es maravilloso.

Tu primer disco, ya en plan solitario, es “Jugando a Perder”, para el que hiciste una versión mexicana. Háblame del proceso de composición de este disco

Es un disco que contiene siete canciones, de las cuales, las primeras cinco se grabaron en España y las dos últimas, grabadas en acústico, sólo las tiene el disco hecho en México. Son canciones que ya escribí aquí. Y eso es lo que quería, que la versión mexicana tuviera algo de México, algo hecho en México, ¿no? Son dos canciones que, después, quiero grabar bien con una banda, porque son como una antesala de lo que será el siguiente disco. Son canciones que, para mí, son más mexicanas que españolas.

Hace unos días, tuviste un concierto acá, en el Foro del Tejedor, ante un público extasiado, ¿no? ¿Cómo te sentiste?
Lo del Foro del Tejedor fue increíble. Fue un concierto inesperado. Lo armamos en un tiempo muy corto y se anunció con muy pocos días de antelación. Lo concretamos un lunes y ese mismo día, por la tarde, se hizo el cartel y lo anunciamos en las redes sociales. Para mí, este foro tiene mucha magia; un sitio en donde suenas muy bien y yo mismo he venido aquí a ver a muchos compañeros y, entonces, el pensar en estar en ese escenario, a mí me hacía mucha ilusión.

Y bueno, con penas unos tres días de haberlo anunciado, nos llevamos la sorpresa de que vino mucha gente, y eso a mí, de verdad, me emocionó mucho. Nunca me había pasado. Para mí fue algo muy bonito. Eso, precisamente, tiene México. Te apoya, te sigue y está a tu lado siempre. Y eso, ¡joder! Estoy eternamente agradecido, de verdad.

Escuché, una vez, una frase que decía “si quieres conocer España, vete a América”… ¿qué piensas de ello? ¿Qué has visto en este país, México, que sea muy particular del español?
¡Joder! Estoy totalmente de acuerdo con esa frase. Vaya, me traería a muchos españoles a vivir acá para que aprendieran muchas cosas. Tenemos muchas cosas que aprenderles, sinceramente. Esto lo digo, por un lado, orgulloso, porque quiero a México y creo que tengo la licencia de poder decir que este país es increíble en todos los aspectos; en educación, en respeto, te enseñan muchas cosas, aprendes muchas cosas, que en España se han perdido. Yo vivía en Madrid y, de verdad, no me acuerdo de quién era mi vecino de enfrente, así te lo digo. De verdad, yo me traería a muchos españoles acá para que vean la pasión con la que afrontan el día a día. Es algo muy envidiable.

¿Cómo se siente Javier Miñano con su trayectoria como músico?

Yo estoy muy contento. Hago canciones por necesidad y sin ninguna pretensión de si son buenas o son malas. Sólo con la intención de salir contento y satisfecho de ellas. Hace unos días habla de eso, justamente, con un amigo mío que es actor. Estábamos los dos tomándonos un café, filosofando de la vida, y yo le decía “tío, yo me considero una persona con éxito”, y él me respondía “yo también”. No somos conocidos, no llenamos estadios, no vendemos un millón de discos, pero hacemos lo que queremos y para mí eso es el éxito; levantarme por la mañana y pensar en canciones, pensar en música, en agarrar la guitarra y tocar. Eso es para mí el éxito.

Javier, antes que todo, gracias por tomar esta entrevista, ha sido un placer y un honor. Por último, cuéntame sobre tus planes inmediatos. ¿Qué viene para ti, musicalmente hablando?
Bueno, tenemos ya unas presentaciones en puerta fuera de la Ciudad de México. Estaremos por Toluca, Querétaro, Morelia, Guadalajara, León, Guanajuato, Puebla. Iremos a los sitios en donde nos quieran y nos llamen. Estaremos unos dos meses girando por toda la república y ya estoy maquetando las canciones de mi próximo trabajo. Quiero grabarlo en México, que sea mexicano y lleve su sello. Volveré a España para hacer unos shows en Madrid, Valencia y Barcelona, aunque no está todo definido. Lo que es seguro es la gira mexicana y la grabación del segundo disco aquí, en México.  

A título personal:

Amigos españoles (quienes lean esto), les envío un saludo, prometiendo entregarles otra historia/entrevista sobre alguno de sus compatriotas que visita mi país, México. Por el momento, les comparto que, dentro de unos días, estará por acá Carlos Sadness y los geniales Los Secretos. Espero poder contarles una historia con cada uno de estos artistas. Nos leemos la próxima.  

Contratación Javier Miñano
cero6agencia@gmail.com