Reseña por Manuel López para El Mundo de Tulsa

Son La Brecha, y aunque quizá los encuadraríamos en cualquier otra lugar, vienen desde Andalucía. Más concretamente, Forever (guiitarra y voz), Toni (batería), Alberto (bajo) y Luife (guitarra) reparten rock con base en las provincias de Málaga y Córdoba.

Debemos remontarnos a 2013 para encontrar el origen de esta banda, desde entonces suman dos discos en su haber. Tras Humanidad podrida (2014) vuelven con Descanso eterno, un EP lanzado en 2016. Esta última es una colección de nueve temas que navegan en aguas de rock, punk y metal.

Abren fuego con Monopolio de tontos, un track crítico y guitarrero que nos señala el camino que tomará este disco. Vértigo en las guitarras y una voz que rasga hasta la última entraña, así se presenta La Brecha. Del mismo modo continúan con Aguas fecales, en las cual esta banda y su frontman, Forever, nos traen a Kutxi (Marea) a la mente. ‘Aguas fecales me recuerdan en tu ausencia / puños con rosas y gaviotas a volar’… Directo al desgarro.

Pausa. Aquello que parecía que no encontraríamos en este disco aparece con Descanso eterno, una balada sintetizada y lúcida que manteniendo la actitud trota a un ritmo reposado. La canción da, a su vez, nombre a este album. Es así como llegamos a Bésame, una tema diferente dentro del disco. Un canto al placer, un disparo directo en el que las guitarras y la batería vuelven a hacerse dueñas y señoras de la melodía. Me quedo con los riffs de este tema. Nivel abrumador en las cuerdas.

Como dijimos en un principio La Brecha se endurecería y es quizá en Flores resecas donde encontramos el primer contacto más punk-metal. Atisbamos las mejores influencias en esta canción que nos trae a la memoria grupos como Kortatu o La Polla. Letras provocadoras, melodía implacable. Uno de los obligadas dentro de Descanso eterno. Posteriormente, en el sexto y séptimo tema, al igual que ocurrió en el tercer corte del disco, volvemos a encontrar otro cambio de ritmo. Semillas de odio y Puta mal pagá, sin perder el carácter crítico y reivindicativo, nos muestran dos canciones pausadas que por momentos se recrudecen a través de las ya familiares guitarras de La Brecha.

Encaramos la recta final con un pildorazo sin prejuicios. Li lo la rompe en tono festivo y sin mirar atrás. Mantiene la esencia del disco, el cual ha demostrado tener un sentido y concepto claro, tanto en sonido como en lírica. Para finalizar, tenían un arma guardada a conciencia. Bendito piano el que acompaña a Forever en Perro fiel. Precioso tema para tirar el telón abajo. Para mí, la canción más valiente, pura y de calidad de este disco. Un tema sangrado sobre las teclas, como todo este disco: una declaración de amor por la música. Un pequeño regalo que puedes otorgarte si eres un amante del rock de siempre. El cual, quizá, nunca aparecerá en las primeras planas, pero sabes, de corazón, que jamás desaparecerá de tus venas.

Contratación
Labrechabanda@gmail.com

DESCARGAR DISCO SPOTIFY