Reseña por M.M.O para El Mundo de Tulsa

El dúo navarro Lemon y Tal, formado por Beatriz Tubía (voz y coros) y Gorka García (guitarra española, guitarra acústica y coros), presenta «Sueños coleccionables«, su primer disco de larga duración, publicado por El Gringo Music el pasado mes de junio. Diez canciones propias grabadas, mezcladas y masterizadas por Ivan Barquero y Gustavo Alves en Estudios Awake (Tudela, Navarra), para las cuales los dos músicos han contado con la colaboración de Luis Andrade (guitarra eléctrica), Roberto Palacios (bajo eléctrico y contrabajo), Ivan Barquero (teclados, acordeón, pianos y órganos), Alexey J Rodríguez (baterías y percusión), Rafa Enrique Esteve (trombón), Mario Gómez (saxo) y Mikel Alcasena (coros).

Díez canciones publicadas gracias a una campaña de micromecenazgo, y escritas en castellano, donde Lemon y Tal habla de los sueños que se persiguen y temas intemporales como el amor o el desamor, pero también de la actitud realista ante la vida y asuntos más actuales como las redes sociales. Letras que interpretan con un sonido y una actitud a medio camino entre la música de autor y el pop comercial, y con una frescura que se respira desde la portada, obra de la diseñadora gráfica navarra Elisabeth Moleiro.

«Sueños coleccionables» presenta a Lemon y Tal como un punto de afluencia de diferentes músicos, como El Kanka, Rozalén o Jorge Drexler, y estilos como la música de circo, de cabaret o cantina, el reggae, el flamenco, la música mestiza, la música tradicional, el tango o la habanera. Y con un sonido, de claras armonías vocales y limpias guitarras, que gira alrededor de un estilo de composición directo y sencillo, pero rico en matices, alejado de las baladas pop sentimental del dúo En Clave, propuesta anterior de Beatriz y Gorka.

Álbum optimista y honesto, de canciones fáciles de escuchar, pegadizas, luminosas y de mensaje positivo, pero sin carecer de su profundidad, «Sueños coleccionables» camina líricamente siempre entre la sensibilidad y la alegría, la mayoría de las veces con un equilibrio ejemplar. Y en su mejor momento, como en «Lloverá en ti«, «Tu boca» o «Cicatrices de mi realidad«, cuenta con canciones realmente bellas, y eficaces ritmos vertiginosos como «El libro de la soledad» o «Sueños coleccionables«. Todas las transiciones, los saltos y los cambios, bastante naturales, con la voz de Beatriz Tubía como elemento dominante en medio de toda la energía y hábil anarquía, con su capacidad de controlar cualquier tipo de entorno musical en el que se encuentre.

Interesante carta de presentación, «Sueños coleccionables» nos muestra la gran profundidad del arte de Lemon y Tal. Sin embargo, todo podría lucir aún más en un disco con un estilo y sonido más cohesivo, con los principios de su collage sonoro más definidos. Las ideas geniales en su primer trabajo discográfico son tantas que es difícil digerirlo en una sola escucha.

Contratación
lemonytal@gmail.com

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